El viaje interno





B.H.


A todos nos gusta pasear, ir de viaje, ver lugares nuevos, conocer sus diferencias con otros lugares, ya sea por el clima, las flores y cultivos, monumentos, museos, o teatros, etc.,

Repetimos en diferentes viajes, lugares que nos fascina o porque tenemos familiares o conocido en él. No importa el clima o la distancia, ni las esperas en los lugares de transporte, sean avión, tren o autobús porque vamos de paseo a un lugar deseado.

La vida es un viaje pero no solo por lo que viajamos físicamente, sino porque es también un viaje de carácter espiritual, hacia adentro. Este es un viaje que deberíamos hacer a menudo, no solo cuando estamos en problemas, caemos o fallamos. Es un viaje que aunque sentimos miedo de descubrirnos debemos hacerlo, si ello nos lleva a evaluar objetivamente nuestro interior para reevaluar nuestro camino y hacerlo cada vez mejor.
Pero en este viaje también hay enemigos de los que debemos cuidarnos: nuestro ego, comodidad, conformismo, auto justificación, mediocridad, excusas…..entre muchos.

La vida es un viaje a un estado de mejoramiento continuo, de ser mejor individuo, de refinarse cada vez más, de aprender, de caer, de levantarse de reír, de llorar, de dar, de recibir, de enseñar y de aprender.

Vivimos en un mundo físico, donde pasamos el día a día haciendo nuestras labores, llevando a los niños al colegio, trabajando, ocupándonos de los quehaceres de la casa, compras, y a veces se nos olvida que somos seres físicos y espirituales y que cada uno con sus retos y misiones está aquí para ser mejor cada día y hacer de este mundo una morada de D-ios, esto quiere decir que cada una de las labores que nos toca hacer debemos de impregnarla con esta dimensión espiritual.
Debemos revisar y reafirmar, recordar cuál es el objetivo de nuestra existencia, que estamos haciendo por lograrlos y reorganizarnos hacia esta meta de traer santidad y divinidad en lo que hacemos, desechar las acciones y pensamientos superfluos e innecesarios que no nos ayudan a construir un mundo mejor.

Que este nuevo ciclo que se inicia, traiga bendiciones, paz, alegrías, salud, amor y prosperidad para todo el pueblo judío, para Israel y ello nos lleve a la paz y amor de todos los pueblos y lograr hacer de este mundo uno realmente mejor.
Nelly kaufman de klein

Comentarios

Entradas populares de este blog

SI NECESITAS UN AMIGO

EL PATITO FEO

Que nadie te haga sentir mal